jueves, 29 de diciembre de 2011

Más greguerías entrelazadas

225- La inocencia mira pelis porno por el ojo de la cerradura.

226- La cerradura es misteriosa.

227- El misterioso guarda sus cosas en bolsas de terciopelo.

228- El terciopelo es la tela del pecado.

229-  El pecado suele empezar con una pequeña tentación.

230- La tentación vive arriba y abajo.

231- Abajo el de abajo, dijo el de arriba.

232- Arriba la birra es un palíndromo optimista.

233- El optimista cuenta de dos en dos.

234- El dos es un envidioso.

235- El envidioso escribe cuadernos con comparaciones.

236- La comparación es la estadística sin números.

237- Los números tienen al 0 algo marginado.

martes, 13 de diciembre de 2011

La última greguería es la siguiente:

207- El fin llegó justo a tiempo al final de la película.

208- La película le dejó un trozo de palomitas entre los dientes.

209- Entre los dientes se encuentran los albergues de las bacterias.

210- La bacteria fue al médico y le confesó que no era más que un virus.

211- El virus no pudo suvir..

212- Suvir o subir, ese es el ortográfico problema.

213- El problema acabó sobornando a la solución.

214- La solución es la musa de los atrevidos.

215- Los atrevidos sienten fascinación por las lápidas.

216- Las lápidas tienen okupas vitalicios.

217- Lo vitalicio empezó con una simple tontería.

218- Una tontería multiplicada por mil es igual a un dogma de fe al cuadrado.

219- El cuadrado y el rectángulo recelan de los catetos del triángulo.

220- El triángulo es el gracioso de la geometría.

221- La geometría va de lado a lado.

222- El lado oscuro vio por fin la luz.

223- la luz del calabozo tiene una inspiración siniestra.

224- Lo siniestro no tiene presunción de inocencia.

225-la inocencia mira pelis porno por el ojo de la cerradura.

viernes, 25 de noviembre de 2011

La última greguería ( la número 165 ), es la siguiente: La lujuria se filtró en la batalla para lograr la paz.

166- La paz se rompió por una cagada de la paloma.

167- La paloma va con sus mejores galas cuando visita al anciano.

168- El anciano se entretiene con sus colección  de pastillas.

169- Las pastillas se dieron un baño de sangre para derrotar al hígado

170- El higado ya no es lo mismo sin su h.

171- La h es olvidadiza.

172- El olvido no es nadie sin su agenda.

173- La agenda toma nota del goteo del tiempo.

174- El tiempo es engañoso: tiene su fórmula y es relativo.

175- Lo relativo depende de esto y aquello.

176- Aquello pasa a ser esto si te acercas un poco.

177- Poco, muy poco casi nada y nada y luego empieza otra dimensión.

179- La dimensión planetaria no tiene ni una puerta.

180- La puerta tiene un ombligo que se conecta con el más allá.

181- Más allá menos aquí, por ahí.

182- Ahí hay un hoyo, dijo la h en su huida.

183- La huida de uno mismo se acaba encontrando con el otro yo.

184- Yo es el capataz del egocentrismo.

185-  El egocentrismo empieza y acaba en el mismo sitio.

186- Un sitio es un lugar del espacio que todavía no tiene nombre.

187- Nombre, apellidos y código postal es el principio de un cuento aburrido.

188- Aburrido y cansado estaba el rinoceronte con la amenaza de su inminente extinción.

189- La extinción se acaba.

190- Acaba cabalmente y va y luego se decide por la cábala.

191- La cábala terminó sus días en la cripta de un castillo rodeado de niebla.

192- La niebla se fue de viaje a Londres para siempre.

193- Siempre tiene una tendencia a mantenerse en el poder.

194- El poder lleva toda su vida en el mando.

195- El mando a distancia se queda tumbado en el sofá todas las noches.

196- Las noches de verano de la infancia nos visitan toda la vida.

197- La vida en alemán parece que tiene otro orden.

198- El orden, en el fondo, tiene su desorden pero no lo dice.

199- Dice la verdad mientras finge que duerme.

200- Duerme y sueña con los angelitos también se lo dijeron al asesino.

201- El asesino de masas  prefiere el bolígrafo al cuchillo.

202- El cuchillo fue el gran protagonista del juicio del carnicero celoso del barrio.

203- El barrio incorporó algunas tiendas con glamour para superar sus complejos.

204- Los complejos se reúnen en secreto.

205- El secreto estuvo a punto de irse a la tumba.

206- La tumba y el ciprés son las coordenadas del fin.

207- El fin llegó justo a tiempo al final de la película.

miércoles, 23 de noviembre de 2011

Más greguerías entrelazadas

La última greguería, la número 120, es la siguiente: El revolucionario se despertó de una pesadilla burguesa.

121- Burguesa y burgués se prometieron su amor en una céntrica hamburguesería.

121- La hamburguesería podría ser un vertedero pero prefiere hacer caja.

122- La caja de ahorros le dio el abrazo del oso a la octogenaria.

123- La octogenaria compra a plazos por temor a la muerte.

124- La muerte es el gran espectáculo del misterio.

125- El misterio sabe vender bien su imagen de tipo interesante.

126- Un interesante interés bancario le llevó a la ruina.

127- La ruina del banquero todavía se pasea  con sus calzoncillos de seda.

128- La seda acabó su ruta en un prostíbulo de lujo.

129- El lujo recluta esclavos que se afeitan dos veces al día.

130- El día a día acumula sacos de 24 horas.

131- Las 24 horas del día llegaron a un acuerdo para determinar la hora de la defunción.

132- La defunción firmó solemnemente su sentencia de muerte.

133- La muerte es el punto y coma de los creyentes.

134- Los creyentes especulan con la bolsa de la fe.

135- La fe se conforma con una colina para el desayuno.

135- El desayuno empieza el día con un anuncio de cereales.

135- Los cereales multiplican sus toneladas para acabar en la renta per cápita.

136- La renta per cápita está formada por un ejército de pobres sin calculadoras.

137- Las calculadoras han jubilado a las tablas de multiplicar.

138- Multiplicar es el vicio inconfesable del banquero lujurioso.

139- El lujurioso bufón contaba chistes intencionados a la reina.

140- La reina hace el amor egregiamente con el responsable de protocolo.

141- El protocolo ordena los cubiertos de plata para que los comensales no caigan en la gula.

142- La gula fue detenida como sospechosa del crimen del supermercado.

143- El supermercado fue el jefe hasta que llegó el hipermercado.

144- El hipermercado fue el escenario de la gran rebelión de las ofertas.

145- Las ofertas acabaron en el confesionario.

146- El confesionario se construyó sobre un antiguo templo dedicado  a la culpabilidad.

147- La culpabilidad fue rescatada por el hedonismo.

148- El hedonismo fue retado a duelo por el sibarita.

149- El sibarita pone caras ante el espejo.

150- El espejo del alma tiene buena  cara con un poco de maquillaje.

151- El maquillaje se pasa la vida disimulando.

152- El disimulo consiguió triunfar en el mundo la falsificación.

153- La falsificación, el fraude y la demagogia montaron una orgía en el hotel  los mafiosos.

154- Los mafiosos decidieron que el silencio fuera su código.

155- El código genético es la novela de la biología.

156- La biología es un sudoku plagado de bichos y plantas.

157- Las plantas se ponen verdes.

158- Las verdes  praderas se pavonean ante el triste desierto.

159- El desierto tiene glamour desde el sofá y por la tele.

160- La tele nos espera cada noche para contarnos un cuento y darnos las buenas noches.

161- Buenas noches fue lo que dijo el estrangulador antes de ponerse  los guantes

162- Los guantes se escaparon en un taxi.

163- El taxi llegó de madrugada a su morada y contabilizó siete carreras y seis buenas noches.

164- Las  buenas noches se olvidan en las noches de lujuria.

165- La lujuria se filtró en la batalla para lograr la paz.

martes, 22 de noviembre de 2011

Greguerías entrelazadas

En esta entrada el lector ( si hay alguno ) se va a encontrar con la particularidad de que las greguerías están unidas, pues la última palabra de cada una sirve de entrada para la siguiente. Así, la greguería se reivindica como un juego de palabras donde las jugadas posibles son infinitas. Con escasas palabras aparecen personificaciones, metáforas, contradicciones, pinceladas de humor, paradojas, hipérboles, guiños culturales camuflados, sutilezas surrealistas, ataques al inconsciente, etc. Y todo con un mensaje sencillo: que tengamos presente que si cada realidad tiene un lenguaje que es comparable a un juego, la greguería se presenta como otro juego, el de las palabras que galopan sin el jinete de un ismo, una academia o un saber específico. Las palabras tienen sus madrigueras que se conectan. En este sentido, aquí aparece un nuevo juguete que quiere crear una cadena de términos. Y esa cadena aparentemente infantil es una especie de maqueta del mundo de ficción-realidad en el que lo formal se viste de inocencia. Ahí van:

104- El cielo estaba antes que el infierno.

105- El infierno tiene parcelas de mármol.

106- El mármol sólo quiere pisadas de la aristocracia.

107- La aristocracia tira las facturas a la chimenea.

108- La chimenea no revela ningún secreto.

109- El secreto no quiere irse a la tumba.

110- La tumba es el recibidor del más allá.

111- Al más allá se le va la olla.

112- La olla no es cosmopolita.

113- El cosmopolita quiere volver a su pueblo.

114- El pueblo perdido tuvo su historia épica.

115- La épica exagera sus hazañas.

116- Las hazañas se refugian en la ficción.

117- La ficción es el sueño verosímil de la fantasía.

118- La fantasía es la hermana rica de la mentira.

119-La mentira compite con la rueda como invento revolucionario.

120- El revolucionario se despertó de una pesadilla burguesa.

miércoles, 19 de octubre de 2011

98- La suma es avariciosa.

99- El laberinto es el pedante de los senderos.

100- La resta cada vez va a menos.

101- La curiosidad se apoya en la barandilla cuando se hace mayor.

102- Al sepulturero ya le daba igual el misterio de la muerte.

103- Todas las virutas se unieron para luchar contra el gran tablero.

domingo, 16 de octubre de 2011

Greguerías

93-  La cucaracha masoquista se echó a los pies de los tacones.

94- El joven matemático calculó sus posibilidades de éxito con la miss de su provincia.

95- La turista se puso de perfil mirando a la pirámide de reojo.

96- Iba y venía de la frontera para ser nacional y extranjero.

97- Tras cuarenta repeticiones la falsedad se convirtió en verdad inmaculada.

viernes, 14 de octubre de 2011

Ville Ritola, el mejor segundo de todos los tiempos.

“ Ville Ritola, el mejor segundo de todos los tiempos “

Cuando se escucha la expresión flying finns ( finlandeses voladores ) el aficionado al deporte la asocia a los pilotos de rally del país nórdico. En realidad, flying finns es en su origen el término que acuñó la prensa  para referirse a los grandes fondistas  nacidos en Finlandia y que reinaron en el atletismo internacional en los años 20. Entre todos ellos sobresale la figura de Paavo Nurmi porque obtuvo 12 medallas olímpicas ( 9 oros y tres platas en tres olimpiadas )  y 25  records mundiales.  Otros voladores, como Ville Ritola,  Elias Katz, Albin Stenroos o Hannes Kolehmainen    se convierten en personajes de relleno, a los  que  la historia les dedica muy pocas líneas y en algunos casos se comete la injusticia de olvidarlos por completo. Para que la trituradora del paso del tiempo no engulla las gestas de grandes atletas, vale la pena rememorar la trayectoria atlética de un corredor que, según los amigos de la estadística, se encuentra entre los 10 mejores atletas de todos los tiempos: Ville Ritola.

Vilho Eino Ritola, más conocido como Ville Ritola nació en Peräseinäjoki, un 18  de enero  de 1896. En aquel entonces Finlandia se había liberado del dominio sueco y  estaba bajo el yugo ruso; sumida en la miseria, el aislamiento y con un frío aliado con la pobreza. La única salida para construirse un futuro era cruzar el Atlántico y largarse a la tierra de las oportunidades, Estados Unidos. A los 17 años se presenta  en Nueva York, donde se reúne con siete de sus hermanas ( en total eran 20 hermanos ). En la gran manzana malvive haciendo chapuzas varias hasta que descubre el oficio de carpintero. Para hacer algo más que trabajar  entre virutas y tablones se va integrando en la colonia finlandesa-americana, que tiene su propio clan y mantiene sus costumbres para que su identidad no se pierda en la voracidad neoyorquina. Un buen ejemplo es la entidad donde se inició Ville Ritola en el atletismo, el Finnish American Athletic Club, asociación cultural y atlética creada en 1901 ( curiosamente sus fundadores pertenecían a la comunidad de origen finlandés  que hablaban sueco ). Su descubridor y luego entrenador fue Noppe Väino, tras verlo correr en una carrera popular en las calles de Nueva York. El Finnish American Athletic Club tenía una inspiración socialista y su intención más profunda era la de hacer deporte, baile y teatro   para  que los emigrantes finlandeses no cayeran en la evasión del alcoholismo;  eterna droga de los pobres que ayudaba a huir de la morriña nórdica en aquel Nueva York donde cada avenida tenía sus torres de Babel y cada grupo de emigrantes creaba su nueva vida combinando las raíces de su país con la nación de acogida. Los historiadores dicen que los finlandeses tienen un término, sisu, que resume cuál es su espíritu, pues hace alusión a un carácter tozudo, ambicioso y luchador, una especie de cabezonería aragonesa mezclada con el anhelo de triunfo de quien tiene un origen muy humilde. Casualmente, el apodo de Ritola es el lobo de Peräseinäjoki y en finlandés lobo es susi. Vamos, que nuestro corredor  tiene algo de sisu y de susi.

Empieza la década de los 20 ( años que recuerdan a los 80 en España ) y el jazz, la juerga, los rascacielos, el automóvil, el cine mudo y la lucha de las mujeres por  el voto son algunos de los símbolos del momento. En la siguiente década la  situación cambió drásticamente: crisis económica, el fascismo en auge, la radio en los hogares, la explosión del fútbol y la inminencia de una guerra mundial.

Es en 1919 cuando se tiene constancia de la primera carrera de Ritola. En 1920 el gran Hannes Kolehmainen, que pertenecía  al mismo club de atletismo que Ritola y ya había conseguido un oro olímpico en la maratón de Estocolmo de 1912, intenta convencer a su compatriota para que  participe en los Juegos Olímpicos de Amberes de 1920. El  de Peräseinäjoki considera que todavía su momento no había llegado. El Día de Acción de Gracias de 1921 se celebró en Berwick, Pennsilvania,  una prestigiosa carrera urbana;  desde el inicio  encabezada por Ritola y con un rival singular, un perro abandonado, que le acompañó en la victoria hasta la meta. Los chavales del instituto de Berwick tuvieron todo un detalle al adoptar como mascota al resistente e inesperado atleta de cuatro patas. En 1922 consigue una segunda posición en el maratón de Boston, siendo primero el célebre Clarence DeMar, quien a día de hoy conserva el record de victorias con un total de siete; la primera en 1911 y la última en 1930, por lo que justamente se ganó el sobrenombre de Mr. DeMarathon. Entre 1921 y 1927 Ritola arrasó en la mayoría de campeonatos nacionales americanos de fondo ( concretamente 18 victorias ), pues nunca participó en los nacionales de su país natal. En 1923 se convierte en el mejor corredor de Estados Unidos entre las 3 y las 10 millas y ese mismo año regresa temporalmente a su país para preparar los próximos Juegos Olímpicos. En la prensa deportiva resaltaban sus victorias sobre la gran promesa local, Joie Ray. Los diarios neoyorquinos cambian Ville por Willie y así lo convierten en uno de sus héroes deportivos. El atletismo despertaba interés porque los americanos le daban un toque de espectáculo a las competiciones, especialmente las que se celebraban en el recinto cubierto del Madison Square Garden, donde los espectadores jaleaban a los atletas entre la espesa nube del humo del tabaco. El joven carpintero entrenaba en el barrio de emigrantes del Bronx,  con un sistema algo rudimentario, ya que para correr se calzaba unas  botas en las que incorporaba un peso extra en los tobillos.

En  1924 los Juegos se celebran en Paris. Para tener una imagen de aquel evento basta recordar la película británica  “ Carros de fuego “ , en la que con una música excelente y una notable ambientación se cuenta una emotiva historia plagada de curiosas falsificaciones atléticas ( destaca  la escena en la que Lidell sube al barco que le lleva a Francia y un periodista le comunica que los 100 metros se correrían  en domingo, lo que es una pura invención porque el escocés lo sabía con meses de antelación y estaba preparando el 400 a conciencia  ). En Paris se enfrentan  dos tendencias atléticas: los deportistas proletarios que compaginan humildes trabajos con duros entrenos y aspiran a conquistar triunfos frente a las élites de jóvenes adinerados que entienden el deporte como un asunto de caballeros. Se podría hablar, en consecuencia, de toda una lucha de clases. Las pruebas de atletismo se celebran en el estadio de Colombes, recinto en el que por primera vez se facilita la información a los espectadores a través de la megafonía gracias al avance tecnológico de la telegrafía sin hilos.

Paavo Nurmi es el hombre a batir en las carreras de fondo y el gran favorito en Paris. Se trata de un tipo frío, metódico en su entrenamiento, prácticamente vegetariano y conocido por su rareza de competir con un cronómetro en la mano.

En el 10000, Ritola consigue el triunfo con autoridad y con un nuevo record mundial ( 30:23.2 ). A  Nurmi no le dejaron participar porque ( según la versión oficial ) el equipo finlandés ( Finlandia ya era una nación independiente) consideró que el número de competiciones en las que participaba ya era más que suficiente ( 1500, 5000, 3000 obstáculos, cross individual, cross por equipos y 3000 por equipos). Cuenta la leyenda que, al no correr el 10000, Nurmi se agarró un berrinche,  por lo que decidió correr en solitario  las 25 vueltas en la pista de entrenamiento, dejando el crono en un tiempo inferior al del vencedor oficial. El 5000 fue una de las memorables citas, logrando Ritola  un 2º, a dos décimas de Nurmi ( 14:31.2  ), quien una hora antes también había vencido en el 1500. En el 3000 obstáculos Ville/Willie venció sobre otro volador, Elias Katz, dejando el crono en 9:33.6. Los amantes de la épica deportiva relatan con entusiasmo la prueba de cross individual, donde Nurmi y Ritola fueron primero y segundo con un calor sofocante y un número elevado de abandonos. Aquella carrera tiene habitualmente un titular: el infierno de Colombes. En total Ritola se llevó 4 oros y tres platas y Nurmi 5 oros. En el olimpo de 1924 los diarios franceses hablaban del “poder de la mente “ para referirse a Nurmi. Seguramente  su aire misterioso resultaba más mediático que los méritos de un emigrante carpintero que entrena en silencio en un barrio pobre. Hubo otras gestas en Les Jeux Olimpiques de la refinada Paris; destacando las  de de Johnny Weissmuller  ( primer hombre en bajar del minuto en los 100 m en la piscina y que luego sería fichado por el cine para convertirse en el mejor Tarzán ) y un salto cualitativo, el de William DeHart Hubbard, el primer campeón olímpico negro en atletismo ( 7.44 m en longitud ).

                            
En el invierno de 1924-25  Nurmi volvió a ensombrecer a Ritola, pues  protagonizó una memorable gira por tierras americanas  ( por entonces dieron comienzo las sospechas de profesionalismo, como si el pobre Nurmi tuviera que correr por amor a Coubertain ). En aquel tour atlético ( todo el recorrido se hizo en coche y en tren ) fue recibido por el presidente norteamericano y, a pesar de que no concedió  ninguna entrevista, el New York Times escribió más de 70 artículos sobre el enigmático fines, al cual apodaban The Phanton  Finn. El resultado fue espectacular: 55 carreras ( 51 victorias, un abandono y tres derrotas, aunque algunas fuentes mencionan 53 victorias, una derrota y una abandono ).

La siguiente olimpiada se celebró en Amsterdam en 1928, siendo los primeros juegos con participación femenina en atletismo, a pesar de los reparos de Coubertain y las objeciones del Papa Pío Xl.  Iban a ser  las últimas carreras de los dos voladores. El enfrentamiento más recordado fue la prueba de 5000. Ritola y Nurmi llegaron en solitario a la última vuelta y parecía que la historia de Paris se iba a repetir. La fotografía del lobo de Peräseinäjoki en primer lugar con el dorsal 800 y el hombre del crono con el 797 pertenece a ese momento. Esa vez la previsión falló y Ritola entró en la meta con dos segundos sobre un Nurmi que al finalizar se tiró al césped totalmente exhausto, diciendo luego que jamás había sufrido igual. Ya no hubo más enfrentamientos, pero la saga de los flying finns continuó con Täisto Maki ( en 1939 fue el primer hombre en bajar de la barrera de los 30 minutos en 10000 con 29:54.6 ) y con Viljo Heino (  el último de los genuinos voladores y record mundial de 10000  en 1949 con 29:27.2 ), surgiendo luego en los 70 el inolvidable Lasse Viren ( doblete en 5000 y 10000 en Munich 72 y el mismo doblete en Montreal 76 ). De aquella saga de atletas ya no hay nada, sólo permanece una entendida afición por el atletismo entre el pueblo finlandés y un papel destacado en la élite del lanzamiento de jabalina.

Nurmi y Ritola protagonizaron una serie de batallas  que superan con creces las de Ryun-Keino, Coe-Ovett o Bekele-El Guerrouj. Nurmi tenía fama de tipo raro y taciturno, por lo que no fue difícil que la prensa alimentase una intensa rivalidad personal  y deportiva entre los dos. La mala relación entre ambos no debió ser muy intensa,  ya que en 1971 Ritola regresó a  Finlandia gracias a la ayuda económica de Nurmi, quien incluso medió para que el gobierno le concediera una pensión vitalicia a su antiguo oponente. Tuvo que ser emocionante recuperar los paisajes de su infancia, con los  bosques boreales como nuevos rascacielos de su habitat. Los últimos años de su vida Ritola tuvo una salud delicada porque cuando abandonó la competición empezó una destructiva carrera con la bebida. Su declive personal es uno de tantos capítulos de la larga lista de juguetes rotos del deporte, triunfadores que al finalizar los días de podio y aplausos se convierten en anónimos y, en el caso de Ritola, en un carpintero emigrante con medallas olímpicas  en algún cajón. Ya en su tierra vivió muy modestamente en un apartamento en Helsinki, del que solamente pagaba la mitad de la renta porque el edificio pertenecía al constructor y hombre de negocios que 50 años atrás había sido su gran oponente, Paavo Nurmi. Para los dos mejores voladores del atletismo del país de la bandera blanca y la cruz azul su otrora nación pobre se había convertido en  próspera y todo un ejemplo de eficacia, ausencia de corrupción y con una calidad educativa envidiable. A día de hoy el deporte nacional es el hockey sobre hielo,  una mezcla de patinaje, lucha libre y un disco que se desliza a toda velocidad. Y si hay que citar un producto autóctono, Nokia y su poderío en las telecomunicaciones es el emblema de Finlandia por antonomasia ( Nokia se fundó en el siglo XlX como  una modesta fábrica de pulpa de madera y actualmente es el machote de la telefonía móvil ).

Aquel adolescente que salió de su patria  huyendo del hambre y al final de sus días regresó a  un país  distinto y rico, todavía es recordado por los suyos. De hecho, en finlandés coloquial hay una expresión que alude a su persona, ottaa ritotal, que significa algo así como salir pitando de un sitio.  En Peräseinäjoki ( con unos 4000 habitantes que viven del turismo y de la industria del acero ) hay un museo dedicado a los emigrantes y los del pueblo tienen claro que su hijo ilustre es Ville ( y no Willie ) Ritola. Es más que probable que si    hubiera nacido unas décadas después no habría encontrado la motivación necesaria para darlo todo en el atletismo, porque el tiempo ha evidenciado un axioma: si las piernas y el corazón pueden sacar a uno de la miseria el destino es correr hasta la victoria. Así ocurrió entre aquellos finlandeses voladores de los felices 20 y así sucede en las carreras de fondo desde principios de los años 90, cuando kenianos y etíopes empezaron a gestionar el monopolio del triunfo.

El devenir del tiempo ha dejado un escaso rastro de Ville Ritola: fotografías en blanco y negro, una estatua en su pueblo natal, obituarios  en la prensa internacional en 1982 por su fallecimiento y la citada frase coloquial. Es un humilde y sencillo legado teniendo en cuenta los homenajes y reconocimientos  diarios  a los chicos del balompié. Ya se sabe que la historia y la justicia no tienen nada que ver.

Sobre la vida de Ville Ritola hay algo de información en el museo de su pequeño pueblo y poco más. Su  historia es la de los que quedan en segundo lugar, como Alain Mimoun, Peter Norman o Mohammed Kedir; antagonistas de los más grandes ( Zatopek, Smith y Yifter  respectivamente ).  El nombre de Ritola se asocia inexorablemente al de Nurmi y viceversa; como sucede con Sacco y Vanzetti, Laurel y Hardy, Amundsen y Scott y todos aquellos que triunfaron, fracasaron o pugnaron con   su otro yo. En  el caso de los atletas de plata, los poulidores del deporte, son como los actores secundarios,  unos olvidados que dan sentido y brillo a los protagonistas y Ritola es, probablemente, el mejor segundo de todos los tiempos.

Javier Navarro




            

Greguerías

90- Aquellos ojos del color del mar me llevaron al escafandrismo.

91- La mariposa se puso a flotar con el enamorado.

92- El jardinero tiene ideas asesinas cuando poda.

domingo, 9 de octubre de 2011

Greguerías

87- El golpe es el rugido de los objetos.

88- El logos se pasa el verano tumbado bajo la higuera.

89- El oficinista ocioso escribe por las noches un ensayo sobre el escaqueo.

viernes, 7 de octubre de 2011

Greguerías

68- La mujer del embajador supervisa el protocolo con ropa interior de los chinos.

69- La cámara de seguridad vigila al vigilante que mira el culo de la turista.

70- El naranja no se cree la esperanza del verde.

71- Al duende no le gusta que le saquen a bailar.

72- Salió por la puerta de llegadas para sentirse un turista.

73-Puso buena cara al mal tiempo por educación.

74- El ejecutivo estresado se ahorcó con una corbata de diseño.

75- La greguería es un chasquido de la imaginación.

76- La lotería tiene una edición de sueños completos.

77- El bombo es un zoco de números.

78-  El prostíbulo es un confesionario con momentos de placer.

79- La mentira tiene un armario lleno de trajes convincentes.

80- La mirada de reojo no se compromete.

81- El papeleo ha perdido un sello que le da sentido.

82- El ano es un rutinario acomplejado.

83- La vitamina se refugió en el hígado huyendo de la voracidad calórica.

84- Su  belleza convertía en dulces a sus mentiras.

85- El explotador presumía de su edición en piel de los Derechos Humanos.

86- El universo se expande incluso cuando me miras.

miércoles, 5 de octubre de 2011

Greguerías

65- La galleta está en la gloria flotando en el vaso de leche.

66- En el último segundo el chiste frenó al suicida.

67- La melancolía se lava la cara con el rocío de la mañana.

martes, 4 de octubre de 2011

Greguerías

46- A la rubia de bote le gusta el cuento del patito feo.

47- La llave del cofre se perdió en un cuento de un castillo medieval.

48- El naipe se jugó el futuro a una carta.

49- La greguería espera a la metáfora a puerta gayola.

50-  El titubeo acabó encontrando una bifurcación.

51- Cada una en su sitio, le dijo una pieza del puzzle a la otra.

52- La chica de la falda se coló en una fantasía y acabó sola en un sueño.

53- La congoja había comenzado con un simple suspiro.

54- El crustáceo quiere ser un escafandrista en el exterior.

55- La sábana blanca se olvida de la lujuria en la lavanderia.

56- El pastor sabía que aquel aullido era una despedida.

57- Dijo no y no sabiendo que el sí estaba debajo.

58- El hipopótamo y la jirafa hicieron una rueda de prensa para presentar su nueva fábula.

59- Hay una vocal traidora en murciélago.

60- Aquella cadera casi me rompe el corazón

61- El lobo de mar se puso melancólico en el puesto de pescado.

62- La tortuga tiene una timidez enfermiza.

63- El extranjero es un bárbaro al que hay que explicarle las cosas muy despacio.

64- El hedonismo lleva la h empalmada.

lunes, 3 de octubre de 2011

Greguerías

28- El silbido se tumba bajo la higuera esperando a su amigo el pájaro.

29- Igual y equivalente se abrazan al encontrarse.

30- El portero de discoteca se fue a vivir al campo con un espantapájaros.

31- El bolígrafo  es un símbolo fálico que escribe.

32- El aburrimiento es un silencio cutre.

33- La aritmética disimula su inclinación por la geometría.

34- La fotosíntesis pasa un mal trago al juntarse con los eruditos.

35- El crédito se encogió de hombros ante el capitalismo.

36- El que busca tiene un descubrimiento que le espera impaciente.

37- Las palomas están aburridas del paripé de la paz.
.
38- La palabra acabó en un grito de auxilio.

39- La propaganda y la estadística conspiran en un tugurio sospechoso.

40- El palíndromo regresa como había llegado.

42- La pompa de jabón anhela un mayor papel en la galaxia.

43- La seda y el champán se fugaron con una banda glamourosa.

44- La lágrima vacila ante las mejillas.

45- El adverbio arropa al verbo con un abrigo de terciopelo.

martes, 27 de septiembre de 2011

Greguerías

1- El negrito soñaba con basuras de diseño.

2- Se presentó al jefe con un curriculum de escote y medio.

3- El eufemismo empieza a estar cansado.

4- La chica del mafioso escribe poemas a escondidas.

5- Antes de entrar en el banco ensaya una sonrisa bondadosa.

6- Pedía a gritos que le hicieran esclavo indefinido.

7- Soñaba que tenía una novia rica que le hundía en la miseria.

8- Andaba con su bipedismo paso a paso.

9- La nariz abre sus orificios cuando recuerda su infancia.

10- El parado pasea por el cementerio sus números rojos.

11- Tengo un congreso de neuronas enfrentadas en mi cabeza.

12- El náufrago se aferraba a su código de barras.

13- El Orinoco y el Amazonas se funden en la cabeza de miss Venezuela.

14- El 3 y el 7 ignoran su parentesco.

15- La bandera no quiere que la confundan con el trapo.

16- El candidato evitaba su mirada ante el espejo.

17- La plancha quiere acabar con las arrugas discrepantes.

18- El campo de golf tiene alcantarillas escrupulosas.

19- La princesa teme que el espejo no soporte el interrogatorio.

20- Qué guapa estás, dijo golpeada por la envidia.

21- Póngame tres kilos de hipocresía y dos mentirijillas para llevarme a la oficina.

22- Se tatuó en el corazón aquel verano.

23- Las buenas maneras son la llave maestra de lo cotidiano.

24- Nadie durmió en el congreso de intérpretes de sueños.

25- El tabú y lo prohibido se amaban de madrugada.

26- El cero tiene miles de preguntas.

27- El hombre del traje de rayas se hace fotos en el horizonte.

sábado, 24 de septiembre de 2011

Henry Rono, un guerrero Nandi.

“Henry Rono, un guerrero Nandi “

En nuestros días es difícil que una carrera de medio fondo o fondo no presente un aspirante keniata o etíope para la victoria. El predominio africano es un hecho y el atletismo europeo tradicional se resigna la mayoría de veces o anhela una esperanza blanca en el mejor de los casos.

Etíopes y keniatas acaparan el medallero, los records y los premios en metálico de los grandes mítines. Son reconocidos en el universo de los corredores y, como es lógico, son admirados, tienen patrocinadores y hacen anuncios de zapatillas.

Podemos hablar de la historia de los éxitos ( Bekele o Tergat), pero también existe la historia del olvido atlético. En este apartado Henry Rono ocupa un lugar preferente. Se trata de una amnesia extraña, pues los méritos de Henry Rono nadie ha logrado superarlos. En 1978, en un lapso de 81 días y sin liebres logró batir cuatro records mundiales: 7:32.1 en 3000, 8:05.4 en 3000 obstáculos, 13:08.4 en 5000 y 27:22.5 en 10000. ¿ Quién es Rono ?

Henry Rono nació en 1952 en el seno del grupo Nandi, en la localidad de Kiptaragon, en pleno valle del Rift en Kenya. También pertenecen a este grupo étnico atletas como Kipchoge Keino, Moses Tanui o Bernard Lagat.

Henry Rono ha contado su historia en un libro autobiográfico que apareció en 2007, “ Olimpic Dream “. En sus páginas cuenta que a los dos años se cayó de la bici cuando iba de paquete con su tío y durante sus primeros años su madre pensó que tendría un hijo impedido, pues caminaba con dificultad y tuvo que renunciar a los primeros juegos infantiles. Su madre y su abuela le contaron que los nandis son guerreros enfrentados tradicionalmente a los masais y que en su día fueron un pueblo nómada. Cuando los británicos llegaron con su imperio, sus leyes y su lengua, los nandis les plantaron cara boicoteando la construcción del ferrocarril. La ocupación británica diluyó sus valores tradicionales, pero la familia Rono intentó educar al pequeño para que no olvidara sus orígenes. A los seis años el padre de Henry murió al caerse del tractor por la amenaza de una serpiente. A los 10 años llegó el momento de hacerse un hombre y superó el ritual de arrancarse los dientes incisivos superiores. Los nuevos valores occidentales trajeron la afición por la carrera a pie y los nandis se debatían entre la modernidad del imperio y sus ancestrales costumbres. Los que se integraban, se sometían contentos a las costumbres y el progreso del hombre blanco y los que no lo hacían se aficionaron a la evasión del alcohol. En 1963 Kenya se independizó de la madre patria y por aquel entonces el joven Rono empezó a trabajar en una compañía de té para así pagarse los estudios.

Llegó 1965 y escuchó por la radio el duelo entre el blanco y yanki Jim Ryun y el ídolo de los nandi, Keino, enfrentados en el mítico Crystal Palace de Londres. En ese instante decidió ser su sucesor y abandonó el fútbol para dedicarse a correr por las colinas ( una de ellas lleva actualmente su nombre, Rono Hill ).

En 1973 se alistó en el ejército de su país, donde se dedicó a entrenar a lo bestia. Cuando las zapatillas eran inservibles se ponía las botas militares y recorría la sabana soñando con emular a su ídolo Kip Keino.

En su libro de memorias recuerda su primer viaje como atleta a Uganda y un viaje de 28 horas en avión a Nueva Zelanda. Empezó a codearse con los grandes ( Bayi, Jipcho, Walker... ) y un americano cazatalentos, John Chaplin, lo fichó junto a Samson Kimobwa ( record del mundo en 10000 en 1977, 27:30. 5 ) para irse a estudiar a la Universidad de Washington. Allí empezaron sus días de victorias ( 3 triunfos en el campeonato de cross de EEUU, oro en 3000 obstáculos y 5000 en los Juegos de la Commonwealth de 1978, mítines en Europa y los 81 días de los cuatro records ). En el apogeo de su carrera se encontró con los boicots olímpicos de Montreal 76 y Moscú 80 y, como suele suceder, nadie se acuerda de los que no están en las grandes citas. Los aficionados no olvidan a los que allí estuvieron y vencieron: Viren y Yifter en 5000 y 10000 y Garderud y Malinowski en 3000 obstáculos.

Empezó a ganar dinero, a no digerir el éxito y a beber en exceso. En el verano de 1981 parecía que estaba acabado y sometido por el alcohol. Se presentó a la reunión atlética de Oslo para correr un 5000. Por la mañana se despertó tarde y hecho polvo tras una juerga nocturna de bares y muchas cervezas. Para mitigar los efectos de la borrachera, decidió correr durante más de una hora y sudar así las secuelas de la resaca. Por la tarde llegó la carrera y batió el record del mundo, 13:06.20.

A partir de ese momento, Henry Rono desaparece de las competiciones importantes aunque sigue corriendo; con exceso de peso y herido por el alcoholismo. Perdió el rumbo de su vida y se hizo cliente de los hogares de transeúntes en Washington y luego en Portland. Sin trabajo, llegó a ofrecerse como friegasuelos a los magnates de Nike, sus patrocinadores en los días de gloria ( para ser finos y correctos, diremos que no le hicieron mucho caso ). Vivió en la calle durante años y cuando temporalmente se recuperaba de su adicción trabajaba en oficios marginales, normalmente como aparcacoches. En su periplo callejero y de borracheras se fue a vivir al medio oeste americano, concretamente a la ciudad de Albuquerque, en Nuevo México. Encontró cierta estabilidad trabajando como mozo de equipajes en el aeropuerto. Un atleta marroquí le reconoció recogiendo maletas en las cintas de llegadas y comprobó que ninguno de sus compañeros conocía su historia. El marroquí sugirió al jefe de Rono que fuera al oráculo de Google y escribiera el nombre de su empleado.

En 2002 superó la afición por la bebida e inició una modesta carrera como monitor de atletismo en el Truman Middle School, en la desértica y prefabricada ciudad de Albuquerque; urbe de la América profunda, marco ideal de películas de moteros, con grandes carreteras secundarias y gasolineras rodeadas de desierto; donde antaño los españoles tuvieron parte de su imperio, luego llegaron los mejicanos y, finalmente, los americanos se quedaron con sus tierras. La ciudad de Albuquerque es un lugar híbrido, en el que lo hispano convive con sofisticados laboratorios nucleares y se habla un inglés americano con acento español de machote mejicano. Allí vive Rono, pero últimamente el nómada que lleva dentro se ha perdido por Yemen y entrena a un grupo de atletas de ese país.

Todavía se acuerda de sus colinas, de las leyendas de sus antepasados enfrentados al imperio británico y de sus sueños como atleta. Lleva ocho años sin beber y no ha olvidado la muerte de su hijo mayor, que falleció por un virus infeccioso. Ha vuelto a correr y se ha quedado a unas décimas del record mundial de la milla para mayores de 55 años. Tiene su propio equipo ( Rono Team ) y en su rostro se ven las huellas del sufrimiento y la melancolía. Como no es de por aquí, ningún polideportivo o calle lleva su nombre y tampoco le ofrecen una dirección general de deporte base o algo parecido. En realidad, no le hace falta porque tiene su propia colina en su Kenya natal. Además, tiene una cosa clara y lo proclama orgulloso en su libro: “ soy un guerrero nandi “.