Llega, cual golondrina estival, la cita anual,
la gran fiesta de nuestra corporación empresarial.
Envueltos entre aromas de jazmines
y en un jardín de aire colonial
ahí están todos,
accionistas, empleados, directivos,
hermanados todos.
El gerente, eficaz y sonriente.
El enlace sindical, copa en mano y algo descamisado.
El delegado, marcando mercado, vigilando al subdelegado.
¡ Y la becaria ! italiana, escotada, dicen que algo despendolada,
con una lengua, con una lengua muy afilada.
¡ Y el jefe ! ay el jefe,
rodeado de leales empleados, perfumado,
algo retocado, otros dicen que estirado,
envuelto en un halo, un no sé qué de liderazgo.
Hay una sinergia total
porque todos se llevan fenomenal.
Hay caviar, canapés, tacones altos y morros hinchados.
Es un acto social, empresarial,
es una fiesta genial.
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